lunes, 25 de enero de 2010

Amarte ausente

Pensando de a poco en la ironía
de que mi propia vida no sea mía
que no sea más un lecho de rosas
que me haya ahogado entre tus cosas.

Me digo a mi mismo que es pasado
que tu ya de mi te haz olvidado
que apenas y sé que fue tu vida
pero esa no ha sido la mejor salida.

Pues noche tras noche aún te pienso
y pongo a mi mundo triste y tenso
pues ya sin ti no hay un monarca
y en medio de mi diluvio no hallo un arca.

Te amé talvez tarde, estoy conciente
y mi castigo es amarte ausente
o quizás lo sea tu indiferencia
que me acompaña aún sin presencia.

Recuerdos que nunca han existido
y besos que jamás he sentido
son lo poco que aún poseo
cuando en mis sueños te veo.

Acento de costa y de montaña
miradas y piel en color de castaña
no hay nada de ti que se me olvide
y mucho en mi alma que aún te pide.

1 comentario:

Deja tu comentario sobre esta entrada: